Israel comenzó la deportación de los 124 activistas pro palestinos, en su mayoría franceses, detenidos desde el viernes en prisión.
Fuentes oficiales señalaron que 38 de ellos ya fueron expulsados a Francfort en un vuelo de Lufthansa, mientras que se negocia con otras compañías aéreas -como Easy Jet, Swissair y Alitalia- la deportación del resto en las próximas 24 horas.
Las aerolíneas han indicado que tendrán problemas para transportar a grandes grupos de activistas, ya que se encuentran en temporada alta y la inmensa mayoría de sus vuelos están completos.
Los organizadores de la campaña "Bienvenidos a Palestina" denunciaron en un comunicado que los activistas han sido "maltratados y
sometidos a brutalidad innecesaria" e iniciado una huelga de hambre en la prisión de Beer Sheva (sur del país).
Entre 50 y 100 activistas consiguieron pasar el control de pasaportes en el aeropuerto y llegar a Cisjordania, donde se unieron a protestas anti-israelíes.
Organizaciones civiles internacionales y palestinas habían anunciado la llegada de entre 600 y 1.200 activistas que pretendían originalmente generar disturbios en el Aeropuerto para irrumpir el tráfico aéreo.
Sin embargo, los publicitados preparativos de Israel frustraron el intento. Los oficiales israelíes frustraron la llegada de muchos de ellos al ordenar a las aerolíneas que impidiesen el embarque a unas 350 personas de distintas nacionalidades, lo que ocasionó protestas en varios aeropuertos europeos. EFE y Aurora
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